Cómo una bocanada de aire fresco, es como describo el reciente lanzamiento de Cinthya Miranda. La joven y talentosa cantautora peruana que viene demostrando sus cualidades musicales en la escena nacional, publicó su EP “zelda”, un compilado de cuatro canciones que marcan un giro trascendental en estilo y propuesta, inspirada por Zelda Fitzgerald, una figura icónica de los años 20.
Bajo el manto del destacable sello de A Tutiplén Records, Miranda exhibe una interesante experimentación que dista mucho de su faceta acústica, aprovechando al máximo sus cualidades vocales en otras vertientes que explicaremos en esta breve reseña, como su producción.
Partimos con “casa de moras”, pieza producida por Mynezza Morales. Si has escuchado previamente la potencia vocal de Cinthya, te sorprenderás por los distintos arreglos y efectos en su voz, algo muy presente en el disco. Para los nuevos, algo diferente y quizás no tan novedoso, pues dentro del pop de estos tres minutos y pico de canción, contamos con una intensa energía de lo fi y una letra muy llamativa con un toque explícito que encantará a muchos. Pero, en “bebé melancólica”, asistida por Santiago Morales, seguimos con más sorpresas, ya que la pieza se apoya del género urbano suave como el trap, el cual sumado a los filtros y una letra pegajosa citando dulces populares del país y una descripción llamativa, obtenemos una de las mejores obras de Miranda.
A mitad del tramo, llega “cristales”, que los primeros segundos pensaremos que volvió sonoramente a su propuesta acústica con un rasgueo básico de guitarra, pero es mucho más que eso, pues las estridencias y experimentaciones no se detienen, acertando con los cambios de ritmo con toque urbano que calza perfectamente con su talento vocal, siendo la pieza más bailable y divertida del EP, gracias también al apoyo de Geri the Boy, quien ya conocimos antes su rol con La Negra Valencia en “K Lo K”.
Una versión más movida de “bebe melancólica” cierra el EP, alterando ligeramente la original entre tonos y una secuencia un poco más activa que la original. Personalmente, una opción cuestionable, ya que me hubiese gustado escuchar una reversión de temas anteriores como “Sobre una chica” o “Café para dos”. Aun así, es agradable como finaliza el disco, el cual está disponible en diversas plataformas digitales, como Spotify.
El EP es muy interesante y dinámico. Miranda ha público su mejor trabajo hasta la fecha, gracias a este viaje de experimentación a paso firme entre el pop y lo urbano, empleando al máximo su destreza vocal y fina letra de más cuatro canciones con sentimiento a flor de piel. Fácil, pone la valla muy alta para futuros trabajos, donde la cantautora triunfará, como sucedió con este lanzamiento, el cual recomiendo con mucho gusto.
Escucha el álbum aquí: