Ante la pandemia y la difícil situación de nuestra escena musical, los integrantes de la agrupación de funk toman refugio en las enseñanzas del buda, el yoga entre otras prácticas espirituales.
“La calle está dura” nos dice Gerardo Lama, también conocido como Spicy G, baterista del Big Pollo. “Sin conciertos, el público cuidando el bolsillo y en una incertidumbre generalizada, hemos decidido dejar de hacer música para volvernos maestros espirituales”.
Tato Elera, vocalista y fundador de la banda, deja los escenarios para concentrarse en los chacras: ”Siempre me habían hablado de ellos pero recién los he sentido el otro día. Ahora quiero dedicarme a encontrar más” añadió. Por otro lado, Rafael Benavides, guitarrista, encontró finalmente su vocación en la práctica de la meditación: ”¿Alguna vez has sentido como el estrés te arrastra hacia los senderos de la infelicidad? Yo no”, afirma muy tranquilamente.
“Agradecemos por el aliento que nos está dando nuestro público en esta nueva etapa. Los invitamos a nuestros talleres que serán por nuestra cuenta de Instagram @bigpollofunk. Con mucho cariño les dejamos nuestra discografía en Spotify. No sabemos si volveremos a hacer música ya que ahora estamos afinando nuestros espíritus.” Nos comenta Milky Fresh.
¿Perderemos el Funk de Big Pollo para siempre? ¿La Pandemia nos ha arrebatado eso también? Hasta responder esa pregunta habrá que refugiarnos bajo su manto holístico y encontrar la paz que tanto necesitamos.
Mientras tanto, asegúrense un cupo GRATIS en los talleres espirituales con el Big Pollo en este enlace, efectividad garantizada. Y si quieres escuchar su música para jamás olvidarlo, hazlo aquí:
Yo se que esto también te gustará
-
3 Yardas reaparece con ‘Despertar’, un EP que reanima su instinto guitarrero
-
Desde Ayacucho, escucha «Sin pensar en ti» de Asiri Cristina y Azidney B
-
Tutareasecomioamiperro debuta con “Volver a empezar (PSPC)”: una canción para sanar desde el dolor
-
Nace FLAVA, un nuevo festival que encenderá Lima con perreo y electrónica sin frenos
-
40 Gramos condensa pogos, distorsión y sudor en ‘DeBi TiRaR MáS PoGos’, su nuevo disco en vivo