Javiera Electra es una cantautora y artista escénica trans nacida en Rancagua, formada artísticamente en Valparaíso y hoy radicada en Concepción, Chile. Su música ha sido descrita como una “mezcolanza de ternura y caos”, una etiqueta que, aunque suena contradictoria, le queda precisa. Su camino artístico no partió en grandes escenarios, sino en espacios comunitarios como “El ollón de las putas”, una olla común organizada por activistas travestis durante la pandemia. Desde allí ha ido construyendo un repertorio íntimo y electrificado, donde la canción popular se encuentra con el art pop y el ruido emocional. Hoy presenta “El tiempo y la distancia entregan mucho más de lo que yo podría”, segundo adelanto de su álbum debut, previsto para agosto.
La canción no busca impacto inmediato. Guitarras con eco, silencios medidos, percusiones contenidas y una voz que tiembla con determinación crean un clima introspectivo. Javiera se deja atravesar por lo que canta. Las frases llegan como pensamientos en estado puro. La producción, trabajada en distintos estudios del sur chileno, refuerza ese carácter emocional sin entorpecerlo ni suavizarlo. Cada elemento sonoro acompaña el flujo expresivo con precisión y sensibilidad, dejando espacio para que la vulnerabilidad se exprese en su forma más directa.
Lo más potente es que esa emoción no se agota en lo personal. Javiera compone desde una vivencia trans que no se presenta como eslogan, sino como textura, como estética. En lugar de explicar, su música muestra. Como ya lo insinuaba en su EP @REPRÍS (2023), aquí continúa moldeando una narrativa propia, donde lo político se encarna en el gesto sensible, en la voz que se entrega sin reservas. Su obra no sigue moldes previsibles ni responde a expectativas externas. Solo una búsqueda honesta que se expande con cada canción.
Para el público peruano que aún no la conoce, este sencillo puede ser un primer acercamiento necesario. Javiera Electra no canta para complacer, canta para sostenerse. Y en ese gesto valiente, tan crudo como preciso, logra algo raro: que su historia reverbere en la nuestra.